Tipos de discos para una pulidora

En nuestra tienda se pueden encontrar varios tipos de discos para una pulidora, máquinas que consiguen que las distintas piezas brillen como si fueran nuevas gracias al uso de pastas de pulido.

Estas máquinas trabajan usando abrasivos para pulir, que pueden ser más o menos agresivos dependiendo de la labor que vayamos a hacer, los materiales a pulir, su estado, etc.

Qué es una pulidora

Es una máquina eléctrica (a veces puede funcionar mediante aire comprimido) que se emplea en la industria a la hora de dar uniformidad a diferentes superficies, normalmente chapa y metales, y con la cual se pueden corregir los defectos y los arañazos.

La podemos ver mucho en los talleres mecánicos, en donde máquinas como la pulidora Makita 9218SB, es la preferida a la hora de pulir los faros de los coches con el fin de restaurar su brillo y la transparencia que tenían al salir de fábrica.

Además, es imprescindible en los lugares en los que se dedican a la chapa y pintura, pues les permite igualar superficies, quitar pequeños arañazos, dar brillo a pinturas que lo han perdido, etc.

Diferencias entre una pulidora y una amoladora

Si hacemos una búsqueda por Internet, veremos que a veces ambos términos se pueden confundir y que se llama con los dos a máquinas que son muy diferentes.

Una pulidora está destinada a hacer el trabajo de pulido con discos que siempre son blandos o lijas de granos muy altos que erosionan muy poco las superficies, muchas veces al agua, y solo sirven con ese fin, para desgastar superficies.

Por el contrario, las amoladoras son máquinas más polivalentes, entre cuyas funciones puede estar el pulido, pero siempre con materiales más duros.

Con la idea de entenderlo mejor, con una amoladora y un disco para pulir se puede dar brillo a un trozo de metal como la hoja de un cuchillo, pero no vamos a arreglar la pintura de un coche porque no es la máquina adecuada para ello.

Hay algunas excepciones, ya que si la amoladora tiene control de velocidad sí que es posible pulir piezas más delicadas, aunque siempre tendremos mejor resultado y trabajaremos más cómodos con una pulidora.

Tipos de discos para una pulidora

La pulidora es una máquina que nos sirve de poco sin accesorios como los discos para pulir y abrillantar, que son los que hacen que obtengamos un buen resultado siempre que los elijamos bien.

Discos de esponja

Son uno de los tipos de discos para pulidora que más se usan en la actualidad, ya que son económicos y se pueden comprar en varias durezas que vienen expresadas por los colores de cada uno de ellos.

Es evidente que por sí solos pulen poco, y siempre se emplean con abrasivos para pulir que pueden ir en pasta o en forma de bloques de cera, y los cuales también se venden en diversas durezas.

Discos de lija

Estos discos se suelen pegar a la cabeza de la pulidora y dado el uso que se hace de esta máquina lo normal es que sean de granos altos, lo que quiere decir que tienen poco poder abrasivo, aunque se pueden encontrar en diversos granos.

Para los granos más altos, casi siempre se requiere el empleo de agua, mojando la superficie y luego pasando la lija, obteniéndose así mejores resultados y evitando que el disco se deshaga por el calor.

Recomendamos este disco de lijado hootkit 3M para lijar antes de pulir

Disco de lana

Bien en forma de disco o de funda, la lana también se usa para pulir y de hecho da muy buenos resultados en superficies delicadas o a la hora de finalizar con el proceso por la suavidad que tiene.

Con este tipo de discos se terminan de pulir las viseras de los cascos de las motos y los faros de los coches, dos superficies plásticas que se estropean con el tiempo y que se pueden arreglar gracias a este disco.

Ahora bien, no nos debemos dejar engañar por el material, ya que en la industria podemos encontrar discos de lana de diversas durezas y capaces de tratar objetos más duros.

Disco de fieltro

Otro de los tipos de discos que hay en el mercado son los discos de fieltro blanco D-115X10 CIGSA, que se puede acoplar a la pulidora y que va muy bien para los metales, en este caso en trabajos delicados.

Si queremos pulir metales duros como el acero, o incluso quitar el óxido, podemos emplear un disco de fieltro CIGSA D-115 Y M-14 refrigerado, lo que ayuda a que no se queme por las altas velocidades que se necesitan en este caso.

Todos los tipos de discos para una pulidora que tenemos en nuestra tienda convierten a estas máquinas en accesorios muy útiles, pues cambiándolos se puede restaurar y sacar brillo a varios tipos de superficies, obteniendo acabados perfectos que dan una presencia increíble a las distintas piezas.