Para que el agua salga por nuestro grifo es necesario que previamente sea captada de un embalse, sea conducida por una red de tuberías y tenga una acometida domiciliaria a nuestro edificio o vivienda. Pero esto no sería posible si no estuvieran colocadas estratégicamente varios tipos de válvulas industriales a lo largo de este recorrido, ya que son las que se encargan de dirigir y regular el fluido. Veamos qué son estos elementos, para qué se utilizan y los diferentes modelos que hay.
Qué son las válvulas industriales y para qué sirven
Según la norma EN-736-2 del Comité Europeo de Normalización (CEN), las diferentes clases de válvulas industriales son dispositivos mecánicos que permiten detener, iniciar o regular el flujo de un fluido que circula por una red de tuberías de transporte. Esto lo realizan a través de sus piezas móviles, las cuales gracias a su grado de apertura o cierre son capaces de alterar la circulación de un líquido o un gas.
Las válvulas industriales pueden definirse, también, como un mecanismo que es capaz de regular el caudal de un fluido entre dos puntos. Es un mecanismo porque es un conjunto de elementos que desarrollan una acción gracias a la transformación de la energía recibida. De esta forma, los elementos que componen una válvula pueden ser de origen electrónico, mecánico, hidráulico…
Tipos de válvulas industriales
Se puede hacer una clasificación de válvulas industriales en función del cometido que desempeñan. De esta forma, se pueden dividir en aquellas que son de aislamiento, de retención, de regulación o de seguridad. Veamos qué características tienen.
Válvulas de aislamiento
Estas válvulas y sus tipos tienen como misión la de interrumpir el flujo de modo total. También se las denomina válvulas de cierre, bloqueo, interrupción o corte en virtud del propósito que tengan dentro de una instalación.
A su vez, estas pueden subdividirse de la siguiente forma:
-
Válvulas de aislamiento lineal: Son aquellas en las que el movimiento del eje se realiza de forma vertical. Muy indicadas para manejar fluidos compresibles. Algunos ejemplos son:
- Válvulas globo.
- Válvulas de diafragma.
- Válvulas compuerta.
- Válvulas de guillotina.
-
Válvulas de aislamiento rotatorias: Son las que el movimiento del eje se efectúa en una rotación de 90º como carrera total. Presentan una apertura y cierre muy rápido y se usan en fluidos no compresibles con presiones de servicio bajas. Las más comunes son:
- Válvulas de bola.
- Válvulas de mariposa.
- Válvulas de esfera.
- Válvulas macho.
- En función de cómo se accionan: Pueden ser manuales, autoaccionadas o aquellas que se accionan por energía auxiliar.
Válvulas de retención
Las válvulas de retención se accionan por la propia presión del fluido. Son unidireccionales; abren en el sentido del flujo y cierran en el contrario. Las más comunes son:
- Clapeta oscilante.
- Clapeta excéntrica.
- De disco partido o doble plato.
- Disco con muelle.
- De bola.
- Labiadas.
- Tipo pistón.
Válvulas de regulación
También conocidas como válvulas de control por modificar, según las necesidades, la cantidad de fluido que circula por un sistema. Para ello, tienen instalado un elemento denominado «lazo de control», que es un sistema compuesto por un controlador electrónico que recoge una señal de entrada. Pueden ser mecánicas o de accionamiento manual y, al mismo tiempo, se subdividen en:
- Válvulas mezcladoras: actúan en la mezcla con una proporción determinada de dos o más fluidos para producir uno de salida común.
- Válvulas desviadoras: también llamadas de derivación, actúan sobre dos o más fluidos en su salida a partir de uno único en la entrada.
Válvulas de seguridad
Las válvulas de seguridad también se las denomina de alivio de presión. Son autoaccionadas por el propio fluido cuando detectan presiones superiores a las programadas. Son muy utilizadas en recipientes presurizados para evitar una deformación o rotura de los mismos a causa de una presión elevada.
La elección de los diferentes tipos de válvulas industriales en una conducción vendrá impuesta por las necesidades de regulación que se tengan en el sistema. Gracias a ellas, se puede tener el control de los diferentes parámetros de un fluido y garantizan fiablemente el suministro entre dos puntos de consumo.
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