Cuando hablamos de tecnología relacionada con la industria siempre imaginamos algo muy complejo, con km de cables y una enorme cantidad de chips. Sin embargo, olvidamos que en ocasiones su funcionamiento depende de una pieza tan simple como un silentblock.
Estos componentes, que tenemos en nuestra tienda y que apenas valen unos euros, son imprescindibles en las diferentes industrias, pues sin ellos las máquinas se estropearían rápidamente.
Qué es un silentblock
El silentblock también es conocido como casquillo de goma, un nombre que lo describe a la perfección.
En nuestra tienda tenemos varios tipos de silentblock o soportes antivibratorios, pero todos son muy parecidos. Se componen de un núcleo metálico que va rodeado de goma o caucho.
Pueden llevar uno o dos vástagos con rosca, tuercas o a veces solo un agujero con rosca. Así, ponerlos y quitarlos es muy sencillo, algo que habrá que hacer al ser su vida útil limitada.
Para qué sirven los silentblocks
Si queremos saber para qué sirven los silentblock debemos imaginar una máquina con partes móviles. Estas hacen que todo el conjunto se mueva, vibre y suene mucho.
Reducen las vibraciones
Las máquinas industriales vibran cuando están funcionando. De este modo, los silentblock actúan como amortiguadores gracias a su núcleo de goma.
Con estos amortiguadores no solo se ayuda a que los trabajadores estén más cómodos, sino que se previenen los daños a las máquinas.
Aíslan del ruido
También permiten entornos menos ruidosos. Además de absorber las vibraciones, hacen lo propio con la transmisión del ruido.
Así se puede trabajar en silencio, algo que es imprescindible en algunos trabajos como los de fabricación de equipos electrónicos.
Protegen los componentes
Cuando una máquina vibra demasiado no tarda en romperse. Los tornillos se aflojan, los rodamientos se salen de su alojamiento, los ejes se doblan o se desvían, etc. Por eso, los silentblock reducen los costes de mantenimiento.
Cuidado y mantenimiento de un silentblock
Su parte fundamental es el núcleo de goma. Con el tiempo, la goma pierde propiedades. Se endurece, se cuartea y deja de amortiguar.
Hay que hacer inspecciones regulares
Lo cierto es que mantener estos elementos es muy fácil. De vez en cuando hay que hacer una inspección visual, en la que se comprueba cómo está la goma.
Deben estar limpios
Es muy común que los silentblock terminen manchados de aceite o de otros líquidos procedentes de las máquinas.
Esto es lo que más les perjudica, puesto que estos fluidos pueden ser corrosivos y deteriorar la goma, haciendo que pierda sus propiedades.
Por eso, lo mejor es limpiarlos de inmediato si detectamos que se han manchado o tienen mucho polvo.
Hay que seleccionar el más adecuado
Con el fin de reducir el mantenimiento al mínimo, a la hora de comprarlos hay que escoger los más adecuados, ya que hay bastantes tipos de silentblock como los que vendemos en nuestra tienda.
Así, para que duren hay que mirar las especificaciones, fijándonos en la dureza y en su capacidad de carga. Si escogemos los adecuados para nuestra máquina, nos durarán más tiempo.
Cuándo es recomendable sustituirlo
Como cualquier otro elemento de las máquinas industriales, un silentblock tiene una vida útil que es limitada. Al pasar este periodo hay que poner uno nuevo.
Si el deterioro es evidente
Una de las ventajas de los silentblock es que no es complicado ver que están deteriorados. Solo mirando vemos si la goma ya va cediendo al perder sus propiedades, si se está endureciendo, si hay grietas, etc.
Conforme pasa el tiempo, y si no se han cambiado, incluso es posible ver que el silentblock se deshaga y pierda trozos de goma.
Al reducir su rendimiento
Hay ocasiones en las que las máquinas comienzan a hacer más ruido de lo normal o a vibrar demasiado. Aquí, es posible que los culpables sean los silentblocks, los cuales ya han dejado de hacer su función.
De este modo, si se da esta situación, lo mejor es mirar cómo están o directamente sustituirlos.
Como parte del mantenimiento preventivo
No es necesario esperar a que el silentblock se deteriore a la hora de cambiarlo. De hecho, lo mejor es incluirlos dentro de un programa de mantenimiento y hacer la sustitución cada cierto tiempo.
Esto evita que se desgasten y que ocasionen problemas como las vibraciones, el ruido o incluso que lleguen a estropear las máquinas.
Debemos pensar que estos silentblock tienen un precio muy bajo, por lo que no merece la pena alargar su vida útil. Los más económicos apenas valen un euro, lo que comparado con el coste de una avería no es nada.
Un silentblock no es más que una goma con un vástago. Es una pieza muy sencilla, pero sin ella las máquinas industriales no podrían funcionar como lo hacen. Evitan vibraciones, reducen el ruido y consiguen que los diferentes componentes duren mucho tiempo sin estropearse.
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