La pasivación del acero inoxidable

La pasivación del acero inoxidable

La pasivación es uno de los tratamientos más importantes para el acero inoxidable. Gracias a este proceso se crea una capa protectora que evita su oxidación y su corrosión.

El pasivado del acero inoxidable es esencial con el fin de mantener las propiedades de este material y también para que dure a lo largo del tiempo, en especial en ambientes industriales en donde se expone a factores agresivos.

Qué es la pasivación

Se trata de un proceso químico que se emplea a la hora de mejorar la resistencia a la corrosión de los metales, sobre todo del acero inoxidable; con él se genera una capa pasivadora en la superficie del metal. Mediante este tratamiento, el acero queda protegido de los agentes externos como la humedad, los productos químicos o cualquier otro elemento corrosivo.

Esta capa pasiva del acero inoxidable es una película muy fina, que se compone de óxidos. Estos se forman de manera natural en el acero inoxidable gracias a la presencia del cromo, pero se recurre al proceso de pasivación para optimizar y reforzar esa lámina protectora.

Por qué es fundamental este tratamiento

Ahora que ya sabemos qué es una capa pasiva, es más fácil explicar la importancia del tratamiento. Es cierto que el acero inoxidable ya resiste a la corrosión por su propia naturaleza, pero la capa pasiva que forma de manera natural se puede deteriorar.

Esto ocurre cuando manipulamos el acero en la industria. Los cortes o las soldaduras dañan la protección, de forma que el metal queda muy expuesto tanto a la oxidación y a la corrosión. Si no se aplica esta capa pasiva en un material, como el acero inoxidable, este puede desarrollar manchas, óxido y otras formas de corrosión que afectan tanto a su apariencia como a su rendimiento estructural.

Gracias a la pasivación se restaura y refuerza la capa protectora del acero, asegurando así que mantenga su integridad a lo largo de los años.

Cómo funciona el pasivado del acero inoxidable

Es un proceso que se suele llevar a cabo en varias etapas y para el cual hacen falta algunos productos específicos de uso profesional.

Limpieza inicial

Antes de comenzar con la pasivación, el acero debe estar limpio. Se eliminan los residuos de aceite, de grasa o cualquier partícula metálica que tengan, como las de hierro, que son las más comunes.

Aquí se puede emplear un desengrasante industrial para dejar la superficie preparada, ya que esto es crucial con el fin de que la capa pasiva se forme de manera adecuada.

Aplicación del agente pasivante

Una vez limpia la superficie se pone el agente pasivante. Suele ser una solución de ácido nítrico o ácido cítrico. Mediante la aplicación de esta solución se quita cualquier rastro de hierro de la superficie, lo cual acelera la formación de una nueva capa de óxidos de cromo.

En nuestra tienda tenemos el WS 3634 GEL, un gel pasivante en botes de 1 Kg, de manera que los profesionales podrán dar el tratamiento al acero cuando lo hayan manipulado con el fin de que no se deteriore.

Enjuague y secado

Al aplicar el agente pasivante hay que enjuagar la superficie del acero con agua desionizada. Así se elimina cualquier residuo químico que quede en el metal. Para finalizar, se seca y así se evita la formación de manchas por el agua.

Ventajas de la capa pasiva en el acero inoxidable

Esta capa aporta varias ventajas para el acero inoxidable, entre las cuales están las siguientes.

Protección duradera

La pasivación crea una barrera protectora que evita que el oxígeno y otros agentes corrosivos entren en contacto con el metal. Esto prolonga la vida útil del acero inoxidable y reduce los costos de mantenimiento.

Mantiene el aspecto estético

Como previene la aparición de manchas y óxido, la pasivación ayuda a conservar el acabado brillante y limpio del acero inoxidable, un factor importante en aplicaciones donde la apariencia es relevante.

Cumplimiento de estándares de calidad

En muchas industrias, especialmente la alimentaria y la farmacéutica, el uso de acero inoxidable pasivado es un requisito para cumplir con los estándares de higiene y seguridad.

Fácil aplicación

Gracias a productos específicos como los que ofrecemos en nuestra tienda, el proceso de pasivación es sencillo de realizar, incluso en talleres y fábricas que no cuentan con equipos especializados. Además del gel pasivante, también tenemos todo tipo de productos de acero inoxidable, como tubos redondos de acero inoxidable de alto brillo, codos para soldar, chapas de acero satinado o barras de acero calibrado y macizo de 2 metros.

Con la pasivación se consigue que el acero aguante aún mejor la corrosión. Ya la soporta muy bien por su composición, pero al manipularlo en los talleres y en las diferentes industrias la capa protectora se daña. De esa manera, aplicando el tratamiento se restaura y el acero dura más tiempo en perfecto estado.

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1 comentario

Jose Raúl Baeza Hernández

Jose Raúl Baeza Hernández

Buenos días
Os he comprado el gel pasivante en tienda.
y mi pregunta es el modo de empleo más detallado por que en mostrador y en página oficial no está detallada.
-Forma de hecharlo brocha,espray,etc
- LO MAS IMPORTANTE TIEMPOS DE ESPERA !!!
-Hay que eliminar el producto?
-Si es sí
Con jabón y agua , disolvente

Muchas gracias y espero aclaración

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